A primera impresión es delicada, tierna, incluso frágil, pero cuando la escuchas, además, se convierte en una mujer con garra, muy segura de sí misma y con un torrente de voz que impresiona.
Es Karol Tristán, una oriolana nacida en La Matanza que desde pequeñita sabía que lo suyo era cantar. Ha pasado por orquestas, se ha movido por toda España y ahora vuelve más renacida que nunca, tras una operación de cuerdas vocales que podría haberla dejado sin voz.
El sábado 8 de junio presenta sus canciones en su Orihuela. El Auditorio ‘La Lonja’ es el escenario elegido para deleitarnos con su voz, pero además, para vivir y volver, como ella misma dice a ‘Renacer’.
TODO CULTURA VEGA BAJA ha tenido el placer de poder charlar un ‘ratito’ con ella.
(Al final de la entrevista escrita se puede escuchar el audio completo)
Pregunta: ¡Muy buenas!
Karol Tristán: ¡Buenas! Un placer poder estar aquí este rato contigo.
P.: Toda la vida cantando, ¿qué tiene de especial para ti?
K.T.: En realidad, yo creo que aprendí a cantar antes que a hablar. Mi madre dice que ya desde bien niña me pasaba el día canturreando y así es como empecé a hablar, gracias a la música. No podía impedir que estuviera en mí. Intenté hacer otras cosas en la vida pero todos los caminos me llevan a la música y yo creo que es mi razón de ser. Intenté dejarlo durante un tiempo y me di cuenta de que no podía vivir sin música.
P.: ¿Por qué intentaste dejarlo?
K.T.: Por lo típico de los padres que te dicen que tienes que llevar «una vida normal, algo más estable”. Yo dije: «voy a hacerles caso, voy a dedicarme al negocio familiar». Se dedican a la hostelería y me di cuenta de que no. Acabé en un psicólogo porque no encontraba la razón de ser en mi vida. Tuve que volver a la música y ahora no renuncio a ella por nada en el mundo.
P.: ¿La verdad es que cuando una persona tiene desde pequeñita tan claro algo, es complicado, ¿verdad?
K.T.: Es como te he dicho, es mi razón de ser, forma parte de mi vida y aunque intente alejarlo de mí… Mi familia siempre veía que iba a todas partes canturreando y me decían: «la niña no para». Es como una necesidad interna de expresarme. Yo me sé expresar así, cantando. Soy feliz cantando e intento transmitir esa felicidad y hacerle vivir experiencias a la gente a través de la música.
P.: ¿Tus padres han cambiado de idea?
K.T.: Pues sí. Yo creo que se han dado cuenta de que no tengo remedio. De que no puedo ser de otra forma y han dicho: «vamos a dejarla que haga lo que quiera. Si le sale bien genial, si le sale mal ella se dará cuenta». Yo ya no pienso en que me salga bien o que me salga mal, simplemente pienso en hacerlo y ya está. Haciéndolo soy feliz. Sobrevivo como puedo pero cantando soy feliz.
P.: Vamos a hablar de tu música, porque tú eres más bien popera ¿no?
K.T.: Sí, hago música pop, escucho de todo pero me muevo por la música pop que es donde más cómoda me siento y gracias a las raíces que tengo de mi pasado por las orquestas pues, obviamente, te canto desde un merengue, un cha cha chá, un pasodoble, hasta un tema de AC/DC. Pero lo mío, mi música como Karol Tristán, es la música pop.
P.: En el año 2010, hace nueve años, sacas tu primer disco. ¡Háblanos un poquito de él!
K.T.: Es un disco que cogí con muchísima ilusión porque mi productor, Pablo Manresa, quería que grabásemos algo juntos. Comenzó por grabar un par de canciones y tener algo. Poco a poco le fui enseñando más canciones que tenía escritas, empezamos a darle forma y se convirtió en un disco, algo que nació con muchísima ilusión. Un proyecto muy importante en mi vida, que me trajo muchísimas alegrías, me dio a conocer en muchos sitios, y por supuesto me ha abierto puertas a este mundo de manera más intensa y más profesional.
P.: Tanto que estás haciendo vida en La Matanza, Orihuela y Madrid ¿no?
K.T.: Sí, a Madrid voy cuando tengo entrevistas o cuando tengo que grabar algún vídeo. Mis productores están allí, así que voy cuando es necesario, cuando hay alguna sesión de fotos, promoción o algo así. Pero mi vida la hago aquí en Orihuela, siempre.
P.: ¿Cuál es la canción de la que más satisfecha te sientes dentro de ‘Sentir’?
K.T.: Dentro de ‘Sentir’ me quedo con ‘Es inútil’. Fue mi segundo ‘single’ extraído del disco. ‘Sentir’ es importante porque es la canción que da título al disco, es muy enérgica y muy cañera pero ‘Es inútil’ es un ‘baladón’ que me costó mucho escribir. Es una experiencia autobiográfica de una relación que no salió bien y me costó cuatro años escribirla. Cuando algo está reciente, mi interior se bloquea y aunque quiera escribir sobre ello, no encuentro las palabras y no puedo expresarlo. Cuando ya está cicatrizado puedo hablar del tema libremente. Para mí es una canción muy importante, es muy bonita, me llega mucho al alma cada vez que la canto y la vivo, como si fuera la canción más importante del mundo.
P.: Dices que es una canción autobiográfica pero creo que los cantantes que además componéis, cantáis vuestras propias historias.
K.T.: Sí, en realidad, sí. Siempre nos basamos en nuestras propias vivencias o vivencias del entorno, de la familia, pero pienso que para escribir de algo tienes que vivirlo, si no lo vives, ¡cómo lo vas a contar de esa manera tan intensa y que le haga llegar a la gente! Así que sí, la mayoría, al final, escribimos de los que nos pasa y es donde se refleja todo.
P.: En 2010 el disco ‘Sentir’ y en 2014 ya empiezas a sacar canciones.
K.T.: Sí. En 2014 regresé con ‘You Will Always Be In My Heart’ (‘Siempre estarás en mi corazón’). Es una canción que compusieron mis productores Axel Bereck y Sandra Vilaky para mí. Yo estaba haciendo por aquella época giras con orquestas y me llamaron. Estaba trabajando en la música pero no como Karol Tristán. Me dijeron: «tenemos una canción para ti». La escuché y me enamoró al primer segundo. La escribieron basándose en mi historia, en lo que estaba viviendo en ese momento, me sentí muy identificada y la grabamos. Volví con esta canción y muy contenta porque tuvo muy buena aceptación en los medios, muchísimo más que el anterior disco y aparte, al ser en inglés, me abrió también puertas. Estuve sonando en Europa, en radios de Italia…, así que esta canción fue muy importante para mí y tenía muy claro que quería volver y ahora lo hago con’‘Renacer’.
P.: Pero no es la primera canción que cantas en inglés.
K.T.: No. En el disco ‘Sentir’, también lo hago. Precisamente con la canción ‘Sentir’. Cerré el disco con ella en inglés.
P.: ¿Se lleva bien esto de cantar en inglés o prefieres en castellano?
K.T.: Yo prefiero en castellano. Prefiero mi lengua que es donde me siento más cómoda porque realmente yo no soy bilingüe. En ‘You Will Always Be In My Heart’ tuve en todo momento a Sandra en el estudio corrigiéndome.
P.: Y ahora estamos con ‘Renacer’ y frases tan bonitas que salen de ella como ‘tengo todo lo que quiero y confío y vuelvo a renacer’.
K.T.: En un principio surgió como mi renacer, volver a Karol Tristán, volver a escribir, volver a ser yo otra vez. Luego también se juntó lo de las cuerdas vocales, que tuve una lesión, me tuvieron que operar y ahí ‘Renacer’ recobró más sentido, pero la escribí de una forma que no quería que hablara de mi problema de cuerdas vocales, ni de nada de mí. Quería que mi renacer fuera el renacer de todo el mundo, así que escribí enfocando la canción pasando por encima de todo, para que todos pudieran sentirse identificados. Tenía muy claro que la canción de ‘Renacer’, debía ser para la gente algo especial, que se la pusieran en su casa por la mañana para venirse arriba y decir: «hoy comienza mi día, acabo de renacer y voy a poner el mundo a mis pies». Además, lo estoy consiguiendo porque hay gente que me da las gracias. Me dicen que están pasando por un mal momento «y gracias a tu canción me siento fuerte» y eso para mí es el mayor premio que me puedo llevar, ni Grammy, ni nada. El mayor premio es que alguien me diga: “»racias a tu música me siento fuerte y estoy saliendo de ese pozo».
P: ¡Que bonito tiene que ser sentir eso con personas que no te conocen absolutamente de nada pero que te hacen llegar esa fe en ti!
KT. Exacto. Me hace acostarme con una sonrisa y una paz que ni te imaginas porque de alguna manera siento que estoy ayudando a alguien y el poder ayudar con lo que a mi me gusta hacer, con la música, con mi voz, con escribir, es algo que no tiene precio en realidad.
P.: Has comentado que tuviste una operación de cuerdas vocales ¿llegaste a tener miedo?
K.T.: Miedo no, pánico. Fue muy paralizante. Mis productores el día de la operación estuvieron conmigo de la mano hasta el último momento porque sabían lo importante que era para mí esa operación. Estaba de gira cantando, tuve seis días seguidos de actuación y en el tercero me quedé sin voz. Me tuve que ir a urgencias. Estaba por Teruel. Me pincharon ‘Urbason’, y me mandaron pastillas para poder continuar esa semana. Al regresar, fui al otorrino, me dijo que tenía un pólipo y que seguramente habría que operar. Que acabara la gira y que hiciera reposo. La temporada la acabé en octubre y estuve sin cantar hasta marzo de 2017. En marzo comenzó una nueva gira y pensaba que al haber hecho ese reposo estaba todo más relajado, pero en agosto seguía teniendo problemas. Volví al otorrino y había crecido muchísimo y me dijo que tenía que abandonar la gira ya. Y en agosto que era cuando más trabajo había. Llamé a mi jefe y le dije que me tenían que operar de urgencia y que no podía seguir. Fue todo muy precipitado y no tenía miedo, fue pánico de ver que había crecido, miedo de que la operación saliera mal, de que no cortaran donde tenían que cortar y, sobre todo, en la primera revisión, que fue cuando tuve que volver a hablar. Me daba miedo que no hubiera voz, que estuviera ronca,… Al final, todo salió bien. Fue genial, hice rehabilitación con mi foniatra y de ahí vino ‘Renacer’. Lo que pasa que el momento de ir al estudio y volver a grabar sí que fue un momento de miedo, de inseguridad, de decir: «llevo haciendo esto toda mi vida y ahora tengo que volver a encontrarme cómoda cantando», porque te surge el miedo de cómo colocas la voz, no querer hacerte daño,… a pesar de haber hecho mis ejercicios y saber perfectamente dónde tenía que colocar la voz, pero bueno, eso ya está pasado y ha sido un ‘bachecito’. Al final, como digo yo, cada día es una nueva oportunidad para renacer, para coger fuerzas, así que pase lo que pase en la vida, al final tenemos que darle un vuelco, buscar el lado positivo, de todo se aprende y, al final, lo importante es que tenemos un día más de vida.
P.: Y este bache te dio la oportunidad de ‘Renacer’ y en este caso poder disfrutarte el próximo sábado 8 de junio en el Auditorio ‘La Lonja’.
K.T.: No te imaginas lo ilusionada y contenta que estoy de poder estar en mi tierra presentando mis temas con música en directo. Llevo músicos que son excelentes, de aquí, de la Vega Baja, y estoy muy emocionada de poder presentar mi música para mi gente. Espero que toda Orihuela esté allí esa noche dándome su aliento y su amor.
P.: Cuéntanos un poco cómo va a ir el concierto.
K.T.: En el escenario seremos siete músicos pero también llevo artistas invitados como María Sabater, Isaac Doria, de Elche; Axel Bereck, que es de Elche pero vive en Madrid, y Sandra Vilaky, de Madrid. Ellos dos son mis productores y los traigo a mostrar su arte a mi gente de la Vega Baja.
P.: ¿Y qué? ¿Miedo?
K.T.: Miedo no, es ese nerviosismo de decir: «por fin estoy en mi tierra después de hacer gira por toda España con otras formaciones, presentar mi música fuera, ahora es el momento de hacerlo en mi tierra». Es más ese nerviosismo, pero si tengo que hablar de miedo, sería para no decepcionar a nadie. Eso es lo que me pasa, quiero que todos estén contentos, que se lo pasen bien, poder transmitir todo lo que llevo dentro y que salgan de allí renacidos.
P.: Y llevas un plantel bueno de acompañamiento.
K.T.: Sí, la verdad es que sí, pero va a haber muchas sorpresas esa noche. No puedo desvelar nada, sólo voy a decir que la gente tiene que llevarse una camiseta blanca en el bolso, básica, barata porque vamos a hacer algo.
P.: El próximo 8 de junio en el Auditorio ‘La Lonja’, ¿hay entrada?
K.T.: Sí. La entrada es a 15 euros. Están en la ‘Inmobiliaria Gesicon’, justo al lado de ‘La Lonja’, en La Matanza de Orihuela en Peluquería ‘Moan´s’ y en Bar Central y en el teléfono 617 80 43 84, por wasap se pueden reservar las entradas que se quiera.
P.: Pero además de cantar por toda España, también te presentaste a un concurso en Murcia.
K.T.: Sí, fue en el año 2007, me presenté a ‘Ven a triunfar’. Fui al ‘casting’, que hacían un formato especie de OT (‘Operación Triunfo’), pero sin convivencia. Tendría 22 años y muchos nervios, muchísima ilusión y muchísimos miedos. Estaba cantando en el escenario y me temblaban las piernas y cantar delante de Malú, que es mi ídolo, para mí fue un ‘subidón’ a la vez que decir: «está aquí mi ídolo y voy a cantar delante de ella». Pasé muchos nervios pero me sentí muy arropada por la gente de la Vega Baja. Recuerdo que pegamos carteles, la gente estuvo votando y pasé a la semifinal gracias a los votos. Obtuve el ‘record’ de votación de todo el programa. Se volcó gente de toda España en un programa regional. Yo por aquella época tenía el ‘Myspace musical’ y mis fans empezaron a difundir el número de teléfono. Imagínate lo contenta que estaba de sentir ese calor y ese apoyo.
P.: ¿Esa quizás fue la primera vez que te subiste a un escenario con un gran número de personas escuchándote?
K.T.: Esa fue la primera vez a lo más grande en televisión y, sobre todo, con la presión de que era un concurso. Anteriormente había cantado en televisiones locales pero nunca sientes esa presión, además, la palabra concurso ya me pone nerviosa porque no me gusta competir. Yo siempre digo que la música es un arte para compartir y no para competir. No me gusta esa palabra. De hecho los concursantes hicimos una piña y a día de hoy seguimos en contacto y nos llevamos genial porque queríamos disfrutarlo y pasarlo bien ganara quien ganara.
P.: ¿Alguna anécdota encima del escenario?
K.T.: Pues tropiezos, que se te baje un ‘top’ de palabra de honor, que alguien del público tire un petardo y explote por encima, también me robaron un bolso encima del escenario,… me ha pasado un poco de todo. Trabajar en la noche con la gente que está de fiesta, tiene estas cosas. Tienes que ponerte un poco en plan psicológico, analizar a la gente e ir con cuidado. Cuando la gente se lo está pasando bien y se pasan, tienes que jugar un poco con eso.
P.: Muchos años en el mundo de la música y me imagino que tienes muchas ilusiones pero, ¿con quién te gustaría cantar?
K.T.: Siempre lo digo. Los artistas que van a estar en mi concierto el 8 de junio, María, Isaac, Sandra y Axel, no son artistas mundialmente reconocidos pero para mi son artistas que yo quería que estuvieran allí. Ya es un sueño poder cantar un ‘dueto’ con cada uno. A nivel más de ídolos, pues con Malú, con Thalía me encantaría y con David Bisbal. Si algún día se puede, genial, pero me llena tanto cantar con Malú, que cantar con Sandra Vilaki.
P.: ¿Has compuesto para alguien?
K.T.: No. He hecho colaboraciones con otros artistas escribiendo juntos pero una canción entera para alguien, no.
P.: ¿Y te gustaría?
K.T.: Tendría bastante presión. Ponerte en la piel de la otra persona, ver qué espera… Sería una experiencia nueva que no la descarto, pero de momento prefiero escribir para mí.
P.: Yo te he escuchado y tienes una voz impresionante, así que el sábado nos veremos y te disfrutaremos.
K.T.: Por supuesto. Tengo muchísimas ganas de ver a toda la gente de Orihuela y de la Vega Baja allí. Quiero llenarlo y quiero que el auditorio se venga arriba. Quiero que renazcamos todos y, sobre todo, eso, transmitir el mensaje de que renacer cada día es posible si le ponemos empeño y fuerza, y quiero que me acompañen. Además, es mi cumpleaños y quiero celebrarlo con toda la gente de la comarca, así que desde aquí hago ese llamamiento a que celebremos ese cumpleaños todos juntos y como dije hace poco, todos los cumpleaños perdidos. Quiero que ese día sea el cumpleaños de todos.
P.: ¿A qué hora es el concierto?
K.T.: A las nueve de la noche. La apertura de puertas es a las ocho, va a haber un ‘photocall’, va haber recibimiento, todos los que compren entrada van a recibir un ‘detallito’ por mi parte, que no voy a desvelar. Voy a hacerme fotos con todos y quiero recibirlos allí personalmente.