Bascuñana exigió a la Conselleria de Sanidad que, ante el hecho de que el Departamento de Salud y la ciudad oriolana cuentan con menos afectados de COVID-19 en la comunidad autónoma, «nos dejen seguir recuperando la normalidad y reactivando nuestra economía para poder superar esta crisis sanitaria cuanto antes», ya que cada semana «se pierden puestos de trabajo y perdemos ventaja frente a otros municipios cuyo gobierno autonómico ha solicitado el paso a la Fase 2«
El alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, ha mostrado su preocupación por la decisión de la Generalitat Valenciana de no solicitar el paso a la Fase 2 de la desescalada de la pandemia del coronavirus para que la localidad oriolana pueda seguir avanzando, después de llevar dos semanas en la Fase 1.
Por tanto, el primer edil exigió a la Conselleria de Sanidad que «no lastre más a los hosteleros y comerciantes de nuestra ciudad, y que nos dejen seguir recuperando la normalidad y reactivando nuestra economía para poder superar esta crisis sanitaria cuanto antes. Cada semana que perdemos, se pierden puestos de trabajo y perdemos ventaja frente a otros municipios cuyo gobierno autonómico sí que ha tenido altura de miras y ha solicitado el paso a la Fase 2«. De esta manera, el alcalde oriolano confía en que «toda la Vega Baja pueda pasar a la Fase 2 y que Orihuela pueda hacerlo en todo su término municipal, evitando repetir castigos innecesarios por parte de otras administraciones».
En este sentido, Bascuñana cuestionó el hecho de que si tanto el Departamento de Salud como la ciudad de Orihuela son los que cuentan con menos afectados por COVID-19 en la Comunidad Valenciana, «¿por qué nos tienen injustamente castigados, robándonos la libertad más básica y condenándonos en un momento crucial de la recuperación de la actividad y de la normalidad?».
Por otro lado, el primer edil también exigió «conocer los criterios que se utilizan para determinar qué territorios pasan de fase y quién toma la decisión«, ya que, como señaló «es intolerable este oscurantismo, esta falta de información contraria a la ley de transparencia, nada propia de un sistema democrático».