El libro ‘Celda-19’, del oriolano Pedro Díaz Molins, ha mostrado con fotografías y un pequeño texto el día a día vivido en Orihuela desde que se decretó el Estado de Alarma por la pandemia de la COVID-19.
El autor, que ha mostrado la obra y entregado un ejemplar al alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana; al concejal de Emergencias, Víctor Valverde; y a la representante de Caja Rural Central, Lourdes Martínez, presentará el libro el próximo sábado, 20 de noviembre, a las 19 horas en la sala de conferencias del edificio multiusos del Aula de la Fundación CAM de la plaza Europa.
De esta manera, Bascuñana ha explicado sobre la obra que «se trata de un documento gráfico muy importante que nos va a retrotraer a momentos íntimos viendo determinadas escenas que todos compartimos». Además, va a servir «para recordar una etapa que ojalá no volvamos a repetir» y «recoge ese pasado cercano pero también ese futuro para que posteriores generaciones puedan conocer esa situación que nos ha tocado vivir».
De igual forma, el primer edil ha comentado que esta «situación muy difícil trajo muchas cosas malas y negativas pero también tuvo otras muchas buenas», ya que «conseguimos salvar de una manera u otra y con mucha dificultad la COVID y conocer», además de «estas iniciativas como la de Pedro», a «los que tienen habilidades artísticas y ponerlas en valor», por lo que «es importante acoger esta obra y poder plasmarla en un documento que se pueda compartir con todos y que puedan tener acceso» y, «más aún, haciéndolo a beneficio de una de las instituciones que más trabaja por los más desfavorecidos, como es la Cruz Roja», que «con ese donativo de la venta va a favorecer a los que peor lo están pasando».
Para el recuerdo
Por su parte, el edil de Emergencias ha hecho hincapié en que este libro se explica muy bien en imágenes «como se vivió en Orihuela esos días de confinamiento» y ha añadido que «desde las concejalías de Emergencias y Protección Civil y Sanidad hemos colaborado en que pueda ver la luz, máxime cuando los beneficios de su venta irán destinados a Cruz Roja Española, uno de los organismos que más coloboró en la pandemia para atender aquellas necesidades básicas de esas personas más vulnerables». Por tanto, se trata «de un libro para el recuerdo para enseñar a nuestros nietos durante muchos años y que vean que lo que le contamos no es una historieta, sino que fue un hecho real, que esteb».
En este sentido, Martínez ha felicitado al autor «por la sensibilidad que ha demostrado en este magnífico trabajo fotográfico que ha realizado recogiendo los momentos y las secuencias de la vida en el momento del confinamiento que se decretó con motivo de la pandemia de la COVID-19». También ha manifestado que «este documento gráfico es un testimonio de todos los momentos difíciles y esperanzados que vivimos en el año 2020» y además «es un testimonio de presente porque va a servir para que los que lo vivimos no lo olvidemos y también va a ser un testimonio de futuro porque va a dar a conocer a generaciones futuras todo lo ocurrido» para que «tampoco caiga en el olvido».
Optimismo y pesimismo
De igual forma, el autor de la obra ha señalado que «la documentación de nuestra estancia en la ‘Celda-19’, concepto que viene por haber estado encerrado durante ese tiempo» y porque «se asemeja a la palabra de COVID-19, se redactó y fotografió en el mismo momento que ocurrieron los hechos y cumpliendo con las restricciones impuestas en cada momento». De ahí, esa vision optimista en las primeras fotografías y en el texto, «porque jamás habíamos vivido algo así y nuestro objetivo era cortoplacista», se va cambiando «y la escritura comienza a ser más pesemista porque se alarga en el tiempo». Al final, «la idea es tener un libro en el que todos nos pudiéramos sentir identificados».
Se han editado 300 ejemplares que saldrán a la venta por el módico precio de 20 euros. El libro, que surge como un proyecto fotográfico de instantánea analógica, se divide fundamentalmente en dos capítulos: el primero de ellos, ‘Cuarentrena’, abarca el confinamiento desde el 14 de marzo al 21 de junio de 2020 con fotografías en blanco y negro, y en el segundo, se atisba un cierto optimismo, ya que las ilustraciones van cambiando según la estación del año y van pasando a color.