El Museo de la Fundación Pedrera de Orihuela reabre sus puertas el jueves 25 de mayo en el Palacio Sorzano de Tejada con la exposición ‘Idilio. El despertar de los sentidos’, por la que se reavivan los sentidos de los asistentes con la pintura, la escultura y la música en una experiencia única.

La muestra, que estará abierta hasta el martes 25 de julio, es una manifestación histórica y artística que subraya por su composición el bello y necesario mensaje de unión entre dos pilares del arte, la pintura y la música. Se podrán ver pinturas y esculturas de diversos artistas del siglo XIX, además de instrumentos musicales únicos, al mismo tiempo que se pueden escuchar piezas de música de esa época.

Selección de obras

En esta exposición, como ha señalado su comisario, Marcos Bello, «para experimentar algo diferente», se ha seleccionado una muestra de algunos de los más destacados pintores del siglo XIX, los cuales incluyen en sus cuadros diferentes instrumentos de la época y escenas vinculadas a esta temática de la música. Por tanto, se ha realizado una selección de 60 obras, entre las que constan 20 pinturas, cuatro esculturas de hueso, tres pianos de coleccionista, cinco instrumentos antiguos, un antifonario y 28 esculturas de bronce y marfil.

Además, este recorrido lleva a los visitantes -a través de las obras de los pintores– a dar un paseo por el siglo XIX con la pretensión de tener el cometido de «no solo mirar un cuadro, sino sensibilizarnos, emocionarnos y sacar una lección de ello», ha manifestado Bello. También ha comentado, en relación a las obras más destacadas, que «hay muchas pinturas de pintores que cuelgan de las paredes del Museo del Prado, las de Eduardo León de Garrido y las de Antonio María Fabres y Costa, y tenemos instrumentos», como «un piano de cola de 1887, una reliquia, probablemente el único que hay en el mundo de estas carecterísticas». Entre las piezas únicas, se encuentran «las criselefantinas, que son esculturas del periodo de entre guerras, y es la primera vez que las exponemos», que «solo se pueden ver en Salamanca y ahora en Orihuela o yendo al Museo de Bellas Artes de Houston».

Idilio

Esta muestra se complementa con la visita a tres piezas únicas de coleccionismo, tres pianos excepcionales –uno de ellos ya mencionado por el comisario– y alguna sorpresa adicional. También se detiene en algunas de las esculturas más codiciadas por todo el mundo, características del movimiento ‘Art Decó’.

En estas figuras se podrá observar el particular idilio que existe entre arte y música, ya que todas reflejan escenas de danza y baile. Precisamente, el título que da nombre a la exposición es el «de un cuadro de Mariano Fortuny», un grabado realizado en Venecia que reproduce una acuarela que él mismo pintó en 1868. También -ha seguido diciendo el comisario– es un concepto que pensamos que ocurre entre la pintura y la música, entre la danza y la escultura», por lo que «queremos que las personas vean cómo hay un idilio de verdad entre la pintura y la música».